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“Acercar la facultad al campo”: la UBA dicta la carrera de Agronomía en América
Alberto Orga, director del Centro de Estudios del Partido de Rivadavia, indicó que tendrá un impacto productivo muy importante en el oeste de Buenos Aires.
Alberto Orga, director del Centro de Estudios del Partido de Rivadavia, fue uno de los impulsores de llevar la carrera de Agronomía de la Universidad Nacional de Buenos Aires (UBA) a la localidad bonaerense de América.
En una entrevista con Clarín Rural, asegura que es un hecho trascendental para los chicos de la región que buscan formarse como profesionales en el agro y apuntalar la producción agropecuaria en dicha zona.
-Creo que tenés algo muy importante para contarnos sobre la carrera de Agronomía, que ya hace como 3 años sos el protagonista de haber llevado la facultad de Agronomía, de la Universidad de Buenos Aires a ese partido de la Provincia de Buenos Aires.
- Te agradezco que lo consideres así. Somos un equipo importante, que está detrás de este proyecto, un proyecto de características regionales, que no sólo abarca al partido sino que nuestra intención es imponerlo en todo el oeste de la Provincia de Buenos Aires. El campo de hoy necesita algo más que a los productores, necesita a los investigadores al lado para alcanzar el máximo de producción y esta fue la conclusión que hicimos nosotros en el centro de estudios.
¿Qué mejor que acercar la Universidad al campo? Y en este caso a través de la Facultad de Agronomía. Nuestro lema es, desde siempre, hace más de 15 años que estamos trabajando en esta área, la universidad más cerca, y nunca más cerca que hoy, porque tener en un pueblo de producción agropecuaria a la facultad dependiente de la universidad más importante de Iberoamérica y una de las más importantes del mundo, justamente instalada aquí, nos llena de orgullo pero además nos compromete inmensamente a trabajar para que esta facultad tenga todas las condiciones. Estamos llevando adelante el objetivo a pesar de la pandemia que nos golpea muy duramente para poder ofrecérselo a los chicos el oeste de Buenos Aires y en el este de La Pampa. Estamos saliendo adelante con el fuerte apoyo de la Facultad de Agronomía.
-Entiendo que este debe haber logrado un gran apoyo de la comunidad…
-Sí, por supuesto. Nosotros, el Centro de Estudios Superiores, es el brazo universitario del CEFER, el centro para la formación de emprendedores, una institución público-privada donde además de la Municipalidad participan una inmensa cantidad de instituciones locales, instituciones gremiales del campo, la Sociedad Rural, las cooperativas, los grupos CREA, todos colaboran con participación, con opinión y además colaboran económicamente.
Todo esto requiere de un trabajo muy pormenorizado y de alto costo. Hemos armado un laboratorio adecuado a lo que nos exigen los profesores de UBA, hemos armado aulas virtuales, salidas al campo, es decir, se requiere de inmensos gastos donde los productores y las empresas relacionadas con el agro también participan, y en esto, el CEFER es la institución que nos orienta, nos aconseja y nosotros somos la pata académica donde resolvemos las cuestiones del tipo académicas con la UBA.
-Tuve la oportunidad de estar más de una vez participado de actividades vinculadas a la promoción para la comunidad. Recuerdo que, con German Weiss, que fue Presidente de CREA, todo esto era una preocupación constante...
-Lo mencionás a Germán que es un amigo también, tenemos una relación especial porque es uno de los grandes colaboradores que tenemos en el Centro de Estudios, cuando nosotros hicimos el estudio de campo, Germán fue el primero que nos dió impulso y nos dijo “tenemos que ir por FAUBA además de las autoridades municipales”, Germán (Weiss) fue el primer productor agropecuario al que fuimos a ver. Nos dijo que teníamos que ir por FAUBA porque el prestigio académico de las facultades es sumamente importante, y nosotros lo que no queremos en esta instancia es renunciar al nivel académico por estar en el interior.
Germán nos dio un inmenso impulso, por eso lo menciono. Nos juntamos para seguir planificando, además tenemos otros grupos de colaboradores donde permanentemente participa, impulsa, orienta y aporta, que en estos tiempos duros y difíciles, donde la comunidad productiva, por decirlo de alguna manera, se ha hecho cargo en gran parte de esta cuestión, porque a veces se valora la presencia de las casas de altos estudios en estos lugares.
Si la educación no llega a todos por igual, entonces no sirve, no alcanza. No alcanza con que algunos tengan acceso a la universidad gratuita. No es lo mismo vivir a 10 cuadras de la Facultad de Agronomía, que vivir a 530 km como estamos nosotros, no es lo mismo mandar a estudiar a un chico de acá a Buenos Aires, Santa Rosa o Córdoba que tenerla a la vuelta de tu casa. Esto da una oportunidad y es que todos tienen que tener el acceso gratuito a las casas de Altos Estudios.
Me parece que esto es un punto de inflexión y es que las grandes universidades de Argentina se ubiquen dónde está la producción y donde están los futuros alumnos e investigadores. Los chicos tienen que quedarse aquí, el arraigo que tenemos que alcanzar con esto, la posibilidad de que todos estudien, el acceso a la formación nos habla de que es la riqueza del futuro. La riqueza del futuro no está en el bolsillo, está en el conocimiento, siempre se lo digo a mis alumnos a lo largo de mi carrera y eso tratamos de reflejarlo en el CES, el Centro de Estudios Superiores con el apoyo del CEFER y la Comunidad que se suma aportando ideas y acompañando el proyecto.
En estos momentos están inscribiendo para el segundo cuatrimestre a los alumnos y están empezando con el UBA XXI, que tiene las 6 materias y reemplaza al CBC que se dicta en Buenos Aires. Además el Municipio está preparando y reciclando un viejo molino para convertirlo en un centro universitario.